LA PRIMAVERA EL JAMÓN ALTERA

Creo que el mes de Abril es el que más se parece a mi, puede llover, caer la niebla sobre Sierra Nevada y parecer que se ha perdido la luz, cuando de pronto sale un rayo de sol y todo se transforma en esplendor, fuerza y vida.
También me puede suceder al revés, el día más luminoso, templado y agradable puede terminar en una fuerte tormenta con rayos y truenos incluidos…

La diferencia fundamental entre la primavera y yo es que el equilibrio está en mi, y sólo depende de mi ser feliz bajo la lluvia o a la sombra de un almendro en flor.

A veces tengo la sensación de que todo va muy deprisa, de que pasan por delante de la pantalla de mi ordenador las oportunidades, la innovación, el negocio, es como si aquellas series futuristas de los años ochenta donde los coches volaban o los héroes tenían cacharros mágicos que controlaban todo, se hubieran instalado en la vida de las personas y las empresas.
Sin embargo a veces también siento que todo va muy despacio, que mi vida transcurre como lo hacía la de mi abuela, en torno a costumbres y tradiciones, a valores muy arraigados en la cultura de Trevelez, donde sólo se sobrevive si eres capaz de compartir el tiempo y el espacio con otros, que como yo, lo necesitan para avanzar.

Hace unos meses lanzamos a la red Jamones Abuxarra a través de este blog. Hablar de jamones es mucho más difícil que comérselos, por eso lo regalamos durante un tiempo para que ustedes fueran los que opinaran en primera persona.
Todo ha pasado muy rápido, ha sido increíble ver en tiempo real como lo recibían, lo degustaban y se lo contaban al mundo mundial con fotos, videos y comentarios.
Me gusta observar, compartir y participar en este laboratorio de experiencias 2.0, pero aun me gusta mas porque aquí, en mi cortijo, me siento segura, el tiempo sigue transcurriendo despacio y los jamones se curan cómo siempre lo han hecho, con paciencia, esperando que sólo el tiempo y la más rigurosa tradición del artesano le den ese sabor, aroma y textura de un jamón de antaño.